Somos uno

Al comenzar la presentación de la Programación del curso 2019-2020, permitidme que os salude cordialmente a todos. A la vez, reitero mi acción de gracias por todo lo que estáis haciendo por desarrollar la misión que la Inspectoría tiene encomendada.

“Somos uno” es el eslogan que va a guiar nuestros esfuerzos en estos años. Partamos de la idea de que en la Inspectoría es mucho más lo que nos une que lo que nos separa, y estemos convencidos de que el momento presente nos pide a todos un profundo sentido de pertenencia a la Inspectoría y un compromiso firme con los jóvenes que tenemos encomendados.

Quiero en estas líneas reiterar lo que nos une por encima de toda otra diferencia. La dispersión y la fragmentación nos quitan energías para transformar creativamente los ambientes en que nos movemos. Nos une la fe en un Dios que es Amor infinito y que se hace presente en la historia de los jóvenes y de todas las personas.

Por eso, estas líneas de presentación son una llamada a unirnos en la misión que el buen Dios nos ha encomendado: ser signos y portadores del amor de Dios. Lo que más nos une es hacer el bien en común. Y de eso se trata: de hacer el bien en común. El modo de estar y realizar esta misión es tan importante como el resultado de la misma. Abramos con los jóvenes espacios de encuentro, escucha, oración y diálogo ante los desafíos de la sociedad. Esa misión no es posible realizarla sin entrar en una franca y amplia colaboración con los otros en todas las dimensiones del quehacer humano.

No tengamos miedos ni pereza. El Espíritu está presente en las personas que promueven la fraternidad, con deseo de bien, verdad y justicia. Como os decía en una de las frases pronunciadas en la presentación del programa de este año en los diversos lugares de la Inspectoría, “Se trata de hacer evidente que el Espíritu no ha llamado a compartir vida y misión a incompatibles.  Porque la docilidad al carisma abre vías de entendimiento, concordia, consenso y hasta unidad” (Luis Alberto Gonzalo Díez, VR junio 2019).

La programación que ahora tenéis entre manos es la expresión, para el curso 2019-2020, del esfuerzo por adecuar las estructuras que tenemos a la misión que se nos ha confiado y hemos asumido.

¡Disfrutad de un buen curso!